Todo gran viajero empezó soñando, imaginándose viajando alguna vez. Seguramente ese deseo fue el resultado de la exposición que tuvo a otros viajeros, las películas que vio de pequeño o las historias que leyó en algún lado. Incluso tal vez salió motivado a enfrentar algún miedo o en busca del amor de su vida.
El viajero antes de ser viajero superó los obstáculos para llegar por primera vez a tierras extranjeras. Trabajó, ahorró y disfrutó los frutos cosechados. Se fascinó con la novedad que lo rodeaba y con una cámara capturó todo lo que divisaba. Compartió su logro y su alegría.
Pero también tuvo miedo y sintió tristeza. Se perdió, experimentó la soledad por primera vez y dudó de la decisión que había tomado. Se tropelló con creencias y tradiciones ajenas; y se enredó tratando de explicar algo en otro idioma.
Volvió a encontrarse, recibió ayuda y aprendió a adaptarse. Aceptó y se las arregló para hacer amigos de todo el mundo. Entendió que existen realidades completamente diferentes a la suya y eso fue suficiente para continuar viajando.
Sin darse cuenta se iba convirtiendo en el viajero con el que alguna vez soñó. Ganó confianza y fue acumulando conocimiento de los lugares que visitaba, la gente que conocía y las experiencias que tenía la fortuna de vivir.
Se acostumbró a empacar la maleta y a subirse en un avión. Le perdió el miedo a los tramites de visa y a transitar por los aeropuertos.
El viajero también regresó; culminó su primera travesía y cumplió el propósito con el que salió. Se cansó y entendió la importancia de la rutina. Llegó a casa emocionado de ver caras conocidas y encontró valor en cosas que antes le eran indiferentes.
También experimentó el choque cultural inverso y se sintió extraño en su propia tierra. Comparó los lugares que visitó y extrañó sus aventuras.
Al final, el viajero es viajero porque se vuelve a ir y porque regresa. Se mantiene curioso y aprende a encontrar la aventura en la cotidianidad. Además, es consciente de que todo lo que hace tiene un impacto en sus alrededores. Escoge compartir y transformar realidades… se compromete con proyectos, personas, lugares y con él mismo.
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Excelente escrito Hermano!! Gracias por compartir tu experiencia a gente que tenemos el mismo sueño viajero! Gracias David.
Gracias Fernando!
La importancia de la rutina?
Hola Enrique! Sí, lo importante de la rutina para lograr algo. Por ejemplo aprender danés, crear un negocio por internet, ganar masa muscular etc.Saludos hermano!
Me encanto amigo. Espero no te moleste que lo tome para un vídeo que estoy realizando. Después te contacto porque me interesa mucho vivir en otro lugar. Sin duda una gran motivación en tu página.
Gracias Juan Carlos! me alegra que te haya gustado, compartela por favor (con los respectivos créditos por supuesto) y mandame el vídeo cuando lo tenga slisto para moverlo entre mis redes también. Saludos y las mejores energías!